Somos más de 71.000 familias desde La Araucanía a Magallanes conectadas por la salmonicultura. Mujeres, hombres, jóvenes, personas mayores, gente local o de otras regiones.
En una gran familia salmonera
La salmonicultura ha permitido, también, la creación y fomento de diversas actividades, como la naviera, portuaria, agroindustria y la hotelería, entre otras.
Vincularse con este entorno diverso, con visiones y miradas distintas, con necesidades básicas para su desarrollo integral, ha requerido de un trabajo consistente y silencioso como el que emprendimos hace varios años.
Se ha fomentado el desarrollo de localidades aisladas con pocas alternativas de diversificación productiva, y hoy podemos decir que existe una infinita y variada oferta de servicios que prestamos las más 5.000 pequeñas y medianas empresas que hemos surgido en nuestro querido sur.
35 años después de nuestros inicios y de este trabajo consistente e innovador, podemos decir con mucho orgullo que somos una gran familia salmonera.
En nuestras tierras, los hijos y nietos de hombres y mujeres de mar son actualmente médicos veterinarios, biólogos marinos, ingenieros, técnicos en acuicultura, expertos en genética, profesionales de la prevención.